El cordón umbilical y tu recién nacido
¿Cómo funciona el cordón umbilical?
El cordón umbilical nutre, alimenta, transporta oxígeno y muchas cosas más al bebé dentro del útero. La placenta hace de intermediaria entre mamá y bebé: el cordón umbilical conecta la placenta con el bebé, generando así un intercambio constante en el útero a lo largo del embarazo. El cordón lleva oxígeno y nutrientes que el bebé necesita, en la cantidad precisa según el tiempo de gestación, y se lleva la sangre sin oxígeno y los desechos del bebé.
El cordón es increíblemente resistente, mide alrededor de 50 cm y tiene un diámetro aproximado de 2.5cm, esto permite que el bebé se mantenga conectado con la placenta y al mismo tiempo tenga suficiente espacio para crecer y moverse. Cada cordón, al igual que cada embarazo es único.
Este contiene tres vasos sanguíneos: una vena que transporta nutrientes y sangre rica en oxígeno desde el sistema circulatorio de la mamá hacia el bebé y dos arterias que devuelven los desechos y la sangre sin oxígeno. Luego en el cuerpo de la madre, los riñones se encargan de procesar los desechos para eliminarlos y los pulmones reponen de oxígeno a la sangre. Este flujo es estable y constante en un embarazo sin complicaciones; lo que significa que mamá y bebé están en constante intercambio.
Cuidado del cordón umbilical de mi bebé: ¿Qué debemos hacer?
Después del nacimiento de tu bebé, el cordón es pinzado y cortado. El bebé es llevado a observación mientras que el médico o personal de Biocells recolecta la sangre del cordón restante conectado a la placenta. Se queda un pequeño pedazo de cordón aún sujeto al bebé. Este se caerá naturalmente entre una y tres semanas después del nacimiento.
Tips de cuidado
Limpio y seco
Lo mejor que podemos hacer para que el proceso de sanación y caída del cordón no presente problemas es mantener el área limpia y seca. Hasta que el cordón se haya caído, lo mejor es, al momento del baño, evitar que este se moje. Los baños de esponja o bañar al bebé entre dos adultos para poder sostener su abdomen lejos del agua puede resultar de ayuda para evitar que se moje.
Así mismo es muy importante dejar el cordón al aire para que el área se mantenga seca y así sane más rápido. En un cuarto caliente podemos dejar al bebé unos minutos sin ropa o con una camiseta delgada. Si tu bebé va a estar usando varias capas, por ejemplo al momento de irse a dormir, es importante asegurarnos de que su ropa no esté muy ajustada y que la tela sea transpirable.
Esa pequeña parte del cordón umbilical que queda sujeto a nuestros bebés puede irritarse con mucha facilidad, es por eso que debemos tener cuidado de que la cintura del pañal o de la ropa no esté tocando o rozando el cordón. Algunos pañales para recién nacidos tienen un corte en esa área para evitar roces, pero si no lo tiene es tan simple con doblarlo después de cerrarlo o incluso hacer un pequeño corte con tijeras que deje el espacio justo.
Dejarlo caer
Los abrazos, la lactancia y el contacto piel con piel no afectan la cicatrización del ombligo ni la caída del cordón. Sin embargo, cuando el pedacito de cordón empiece a secarse y a aflojarse no hay que forzar su caída jalandolo o tocándolo, hay que permitir que este se caiga solo y de forma natural.
¿Cuándo preocuparnos?
En algunas ocasiones el ombligo no cicatriza correctamente. Lo importante es estar pendiente de signos de infección:
- Enrojecimiento
- Hinchazón
- Secreción
- Mal olor
- Fiebre
- Irritabilidad
- Vómitos
En caso de creer que hay una infección, es importante comunicarse directamente con el/la pediatra para que decida cuál es el proceso a seguir para combatir la infección y conseguir una cicatrización correcta.
En algunos casos después de que el cordón se ha caído hay pequeñas gotas de sangre en el pañal o en la camiseta del bebé. No es razón para preocuparse. Si el ombligo de tu bebé tiene pequeñas manchas de sangre o costras, basta con limpiarlas suavemente, y estar alerta de los mismos signos de infección. En caso de que alguno se presente, consultar con el pediatra. Los primeros días después de la caída es recomendable mantener el área seca y limpia ya que aún se está cicatrizando.
Puede parecer un proceso largo, pero en menos tiempo del que imaginas el cordón se habrá caído y podrás observar el ombligo de tu bebé, además de poder dar muchos besos en su barriguita.
Fuentes:
Mayo Clinic Staff. “Umbilical cord care: Do’s and Don’ts for parents.” Mayo Clinic. Mayo Clinic, February 19 2015. Web.